viernes, 7 de marzo de 2014

De oscuridad y luces

Me gusta viajar de copiloto por la noche. Por el día me gusta ser la que conduce. Pero por la noche la cosa cambia.

Me gusta perderme en el paisaje, urbano o rural, de oscuridad y luces. Especialmente me gustan los edificios grandes, de fachadas simétricas y anodinas, que por la noche se vuelven de colores.
A través de sus ventanas puedes imaginar historias. Historias sin mayor trascendencia que una visión fugaz a su interior.

Las luces blancas no me atraen. No me gustan. Mis ojos vagan de un piso a otro hasta perderse en las luces amarillas y cálidas.
Me gusta cuando la cortina es translucida, o está abierta, ver el brillo de la lampara, tal vez adivinar un mueble, un cuadro...
Ver pasar una silueta no es mi prioridad.

Me gusta imaginar la casa para de ese modo imaginar la historia de quién la habita.
Con plantas, espacios abiertos, tal vez una pareja joven que empieza a convivir. Muebles oscuros, lámparas de araña; tal vez un matrimonio que se oculta cosas. O una gran tele de plasma y halógenos, podría ser un hombre que vive solo...

Mil historias que se me cruzan al mirar esas ventanas.

Quizá leí demasiado las viñetas de 13 rue del percebe.
Quizá tengo un puntito medio cotilla medio morboso.
Quizá me resulta fácil dejarme llevar por una simple luz hasta perderme en ella.



Lo que si se es que me gusta lo efímero del momento. Sentada en el asiento del copiloto, o en la ventanilla del autobús... en esos momentos en que prefiero no hablar. Solo mirar y dejar vagar mi mente.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Los momentos efímeros son los más bellos... duran un instante y los recuerdas toda una vida...

Mmmm... me has recordado a este post a la ventana indiscreta... bueno la verdad que no es igual... jeje... uf hoy ando con desvarios... ni caso...

muchos besinos y buen finde!! :)

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

Nena lo que yo te diga... perdona que me he repetido... sorry!!!!

Pommette dijo...

Ay, esa ventana indiscreta ;)

Tatu dijo...

Sí que tienen cierto encanto...

Jajaja, ambas habeis pensado lo mismo. Reconozco que tiene algo de vouyer... pero sólo un poco.
Si ya lo digo yo, cotilla y morbo :p

Besos y buen finde :)

LORD SHADOW dijo...

PUES DE DIA O DE NOCHE YO PREFIERO CONDUCIR Y DISFRUTAR DE LA CONDUCCIÓN Y DEL PAISAJE. PERO SIN PERDER DE VISTA LA CARRETERA.
UN BESAZO TATUADA!!!

Tatu dijo...

Pues haces bien LORD. A mí también me gusta y reconozco que cuando mi hombre conduce nos miran raro en el barrio, jajaja.
Pero por las noches las luces me hacen perder perspectiva. Y me refiero a los faros, jajaja.

Un besito ;)