domingo, 4 de octubre de 2015

Cuenta la leyenda... que vendrá otro y lo hará por ti

Cuenta la leyenda que si tú no te ríes de ti mismo vendrá otro y lo hará por ti... Y oye, algunas cosas son demasiado personales para que venga otro y las haga.

Empezaré diciendo que soy una llorona y una penas. A la que me descuido estoy lamentando algo. Que si no tengo con quien salir, que si no tengo gente para quedar, bla, bla, bla...
Pero vamos a ver, alma cándida... tú quedas, pero dos veces al mes.  Lo que pasa es que un finde sola consta de más de tres horas libres y entonces sientes que se te echa el tiempo encima. ¡¡Con la de oportunidades de limpiar que ofrece eso!! Y de leer. Nota mental, pasar por la biblioteca.
Además.... como dicen las webs especializadas, esas tres horas son tiempo de calidad. Y que hay que distinguir entre cantidad y calidad lo sabemos todos, pero puestos a pedir... ¡queremos calidad en cantidad! Nota mental, poner eso en el estado del wass, que vaya quedando claro...

Ya sé,  ya sé... me estoy pasando un  poco. Seguro que hay más temas. Por ejemplo que siempre me quejo de que no tengo a nadie con quien hablar. Me parto. La realidad es que si me dejas hablo un huevo, pero total para lo que digo. Hazme caso, que yo  veces hasta me escucho. Bueno, lo que pasa es que llevo un desfase de tres segundos y para cuando me he escuchado no puedo darle rebobinar y borrar. Como echo de menos las cassettes... puta era moderna.
Pero en serio, yo me bloqueo al hablar de política, no me sale argumentar en temas de actualidad y si no son frivolidades se me nota que no hay nada. Nada en mi cabeza, digo. Y lo peor no es eso. Lo peor es que ni para escuchar valgo, que me cuesta mucho estar callada. Pero eso lo estoy trabajando... aunque no aquí.

Que las personas que quiero están lejos. No, si es que te pones a sacar pegas... y te quedas solas. Pero si hoy no hay distancias. Si te pones hasta puedes follar en la distancia, que no sabe igual (estoy sembrada que no veas) pero si le pones ganas cansa igual. O parecido, que me he venido arriba.
Y además... esto me lo vais a permitir (y como no os escucho tampoco me preocupa si no es así) para que te apuñale por la espalda una cretina que ves a diario, mil veces prefiero gente que esté lejos pero en quien poder confiar.
Y también se puede reír a distancia.

Jeje... de esto no me he quejado -creo- por aquí, pero a veces digo que echo de menos un abrazo, y no diré que miento. Pero la realidad es que me cuesta mucho darlos. Así que tal vez eso sea culpa mía. Soy de esas personas que necesitan mantener su espacio personal intacto, y al mismo tiempo se entregan por completo cuando deciden romperlo. Ah bonita... te jodes y aprendes que hay términos medios. "Toi en eeeeello", y no me ves, pero arrugo el morro.
Además no soy una persona espontánea con lo cual rara vez me voy a lanzar aunque quiera hacerlo. El último que recuerdo fue de despedida en un aeropuerto, hace un par de años. No diré que no ha habido más abrazos espontáneos, pero ese fue el que marcó una nueva etapa. La de "toi en eeeello". Jajaja. No, que va. Tengo la sesera muy dura.
Va a ser que reírse de una sí funciona.

Y bueno, ahora no caigo. Podría quejarme de mil cosas. En serio, podría. Pero por hoy ya está bien, que total ni escribo tan bien ni el tema da tanto de sí. Besitos....