No estoy triste, ni melancólica... simplemente me he cansado de escucharme. De escribir historias que me dejan a medias... que se repiten en su quiero y no puedo.
¿Voy a dejarlo? Probablemente no.
No lo voy a dejar porque es un vicio. Es el vicio de las ideas perdidas... de escribir fantasías...
Fantasías.
Creo que ahí radica el problema, ni siquiera son mis fantasías. Al menos no últimamente.
Y no me molesta escribir lo que me dictan los dedos, aunque no sea lo mismo que me dictan las tripas, y mucho menos lo que me dicta... En fin, diría que la cabeza, pero es que esa no me dicta nada. Se bloquea en imágenes calladas y desdibujadas.
(Tal vez sean bocetos.)
Pero el cuerpo me pide dejarme llevar, ni siquiera sé a dónde... que le de cancha.
Y
es que
en el fondo
me gusta soñar.
Y
me
gusta
sentirme
en otras pieles
6 comentarios:
PUES NUNCA, NUNCA DEJES DE SOÑAR AMIGA MIA.
UN BESAZO TATUADA!!!
El cuerpo es sabio y sabe lo que quiere siempre, es deber nuestro escucharlo y darle lo que pide... :)
Y como dice Lord, nunca dejes de soñar, los sueños nos hacen libres!!
Muaaaaaá guapa!!!!!
a lo mejor lo que busca tu propia piel sea más a otra piel que a su mero reflejo
Gracias LORD, prometo hacerlo. Todavía no vuelvo, tengo que terminar algo primero :)
Un besazo!
Ya sabes Haydeé que me gusta escuchar :)
Besos! Sabes donde estoy :)
Shang... :)
Quizá tener lo uno no excluya lo otro.
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