martes, 17 de junio de 2014

No llores

Miró a su alrededor. La habitación estaba oscura. Ella había desaparecido y apenas sí quedaba algún rastro de su presencia.
Miró el oscuro sofá donde se había sentado alguna vez. Vacío. Mudo.
Miró la ventana que daba a una noche sin luna. Sintió que se ahogaba. Sus ojos se llenaron de lágrimas contenidas. Su visión se nubló. Su mundo pareció desvanecerse.
-No llores.
Escuchó el susurro… y se quebró.

2 comentarios:

Itzala rincon dijo...

Es bueno llorar, te ayuda a limpiar el lagrimal y el alma :-)
un beso Tatu

Tatu dijo...

Lo sé... pero estás entradas me producen una mezcla de sensaciones difícil de explicar.

Un beso Itza