Me permito soñar un poco cada noche.
Me permito fingir que existe el día.
Me imagino una luz que me ilumina.
Que ilumina otros rostro y otra vida.
Me permito soñar un poco cada día.
Y sentir el aroma de otras noches.
Tan eternas que duran para siempre.
Me permito soñar, pero muy poco.
Porque anhelo una vida que no es mía.
Y que acaba doliendo en demasía
No hay comentarios:
Publicar un comentario