lunes, 21 de julio de 2014

Lo que espero

Jo, que mañana es martes y yo así, en bragas y sin saber qué escribir. Bueno, he escrito varias cosas, pero nada que me convenciera.
He escrito sobre lo cabrona que es la tecnología y como me la ha jugado cargándose mi agenda del móvil para a cambio actualizarme el wass. También he hablado sobre la magia que soy capaz de hacer con un mando a distancia... y no hablaba del nada erótico-festivo, que podría. Me refería al televisor. Que soy genial programándolos.
También me he puesto metafísica y he hablado sobre la felicidad. ¿Momentos fugaces o Nirvana eterno? Mira, lo he borrado pero a mi entender los momentos fugaces son los que conforman el Nirvana, te lo digo yo.

Pero nada. Todo ideas y nada que me convenza.

Y la verdad es que no soy capaz de crear un texto semanal, mensual o diario si me centro en crear uno. Sale lo que sale.
Y tampoco se puede decir que escriba de forma ordenada, plácida y coherente... jiji, dejémoslo.

Pero he pensado que puedo escribir sobre lo que espero de esta semana. De aquí al próximo martes (y si hay suerte algún martes escribiré algo interesante).


Pues de esta semana espero disfrutar de cuatro días de vacaciones en la playa/montaña. Sí, así como lo lees. Yo es que no me ando con medias tintas, normalmente me gusta marear la perdiz. Así que playa y montaña. Aguas limpias, cristalinas, o con marejadas, me da igual. Pero con mis niños, y más gente, obviamente. Pero con ellos.
Me apetece una playa nudista, donde pueda despojarme, no de la ropa, si no de las emociones. Que se quede sobre la arena, sobre las pequeñas piedras que conformen la costa. Que las olas laman tan sólo un cuerpo y limpien mi mente.
Me gustaría pasear con un vestido de color coral que me regalaron (nota mental, meterlo en la mochila) y sentirme inmensa. Inmensa en mi alegría, inmensa en mi energía, inmensa en mi sonrisa.
Me gustaría encontrar unos jodidos zapatos que no se empeñen en destrozarme los pies y mostrar en el camino los estigmas de mi dolor. Mañana cambio el segundo par.
Me gustaría escalar la pared donde me llevaran, y demostrar que todavía puedo hacerlo, aunque haga siglos desde la última vez.

Me gustaría inspirarme de nuevo en callejuelas estrechas, en barquitas azules, en los brillos del agua. Me gustaría un cielo azul y unas nubes. Blancas manchitas que lo surquen sin rumbo.
Y disfrutar de la horas de música en el coche, cambiando emisoras sin piedad en busca de la canción deseada y sin encontrarla.
Y ver paisajes que se funden con otros, el cambio eterno del instante fugaz.

Y volver aquí. Con la maleta llena de esperanzas, de sueños, de bocetos mentales.

Y eso es lo que espero... ni mucho ni poco.

PD... no se si el martes que viene podré escribir, de no ser así queda pospuesto hasta la siguiente.
Es lo que tiene ser mi propia jefa...

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Ay nena... eres única y tremenda... Aprovecha estos días y carga las pilas a tope... sabes yo prometo (si, lo prometo porque no salgo mucho de casa, ya tu sabes...) pues eso, que prometo ir a la playa, si, esa que tu y yo sabemos y que tanto te gusta... y desde allí lanzar piedras por ti y por mi...
Y di que sí, que mejor que ser tu propia jefa... porque tú lo vales.. ea...

Muchos besinos preciosa, un achuchón y pásalo genial bien grande!!!

Marrubi dijo...

Me gustaría....

Lo que me gustaría no viene al caso, pero deseo que disfrutes de estos días.

Un beso enorme.


Itzala rincon dijo...

Disfruta, disfruta y disfruta!!!
Un beso guapa :-))

Tatu dijo...

Haydeé, aquel lugar lo llevo en el recuerdo.
Me encanta. Disfruta de él siempre que puedas.

Besos grandes...

Tatu dijo...

Marrubi, gracias por tus deseos, he hecho lo posible :)

Un besazo

Tatu dijo...

Gracias Itza!

Besos!